lunes, 22 de julio de 2013

barco de luna




después de tanto andar cielo abajo el camino
levanté la mirada
aún está la jaula suspendida en el aire
ya sin nuestro canario de los alegres domingos
y sin la piedra blanca del altar de los amigos
ni el ojo redondo del agua

ahora encierra nubes
y vientos del este
y réplicas de antiguos veranos

qué puedo hacer tan apegado al mundo
no mucho más que repasar las cuentas del viejo collar
un rosario de oraciones inútiles
que perdió sus poderes enterrado en la sombra

si estuvieras abriendo las puertas
y los granos de café en el molino
y ese aroma de pan y de lluvia en enero

pájaro amable de los días tiernos
hay al menos dos puntos de vista:
se apaga la luz de la lámpara
pero también amanece


Roberto Esmoris Lara

No hay comentarios: